DOS CABALGAN JUNTOS - John Ford -

El 15 de Octubre de 1960 comienza el rodaje de "Dos cabalgan juntos" de la mano de un John Ford o Jack  que cerca de los 67 años ha cabalgado muchas millas y atravesado muchos ríos con su cámara detrás de los salvajes indios.Y son estos sus fieles amigos "navajos" los que se pondrán a sus órdenes para rodar esta película en la cual echaremos de menos el color rojizo de las formas características de Monument Valley.Unos navajos que no dudarán en emborracharse al lado del actor Woody Strode que en esta película hará el papel del agresivo Stone Calf y al que conocemos también por su actuación en "El sargento negro".
Parece ser que a La Columbia no le agradaba que Strode interpretara a Stone Calf debido al color de su piel,ignorando que por sus venas corría sangre india.

 
 A Ford no le gustaba el guión de esta película basada en la novela "Comanche Captives" escrita por Will Cook en 1960 aunque anteriormente en 1956 rodó "Centauros del Desierto" con un argumento similar: la busqueda de niños secuestrados por los indios durante décadas.
Y juntos cabalgan James Stewart en el papel del Sheriff  Guthrie McCabe al cual solamente le preocupa el dinero que pueda obtener en un buen negocio sin importarle la vida humana; a su lado Richard Widmark en el papel del Teniente Jim Gary militar de vocación que no podría ser feliz en otro lugar que no fuera el Ejército aunque el sueldo no le dé para grandes lujos.
Como en la mayoría de películas de Ford también hay lugar para el humor esta vez de la mano del Sargento Posey el inolvidable Andy Devine que hizo de conductor en "La Diligencia"pero es una película bastante oscura dónde los verdaderos actos de salvajismo no se producen por los comanches sino en el propio fuerte en un baile de oficiales cuando desprecian a Elena la mejicana que fue esposa de Stone Calf interpretada por la guapísima Linda Cristal y en cuya defensa tiene que salir el Sheriff McCabe y dónde podemos apreciar en la ejecución de otro de los indios "blancos"que fueron comprados por los protagonistas y traidos al fuerte la corrupción y la pérdida de los valores humanos de una sociedad que odiaba a los indios pero que eran mucho más salvajes que ellos.

 Destacar también esos magníficos primeros planos y ese dominio de la cámara que tanto caracteriza el cine de Ford como el Sheriff sentado en la silla en el porche de la Comisaría con los pies apoyados en la barandilla mientras le sirven una cerveza.O esa conversación entre los protagonistas sentados en la orilla del río mientras intuyo que el cámara que rodaba estaba empapándose de agua y seguramente también el mismísimo Ford el cual acababa maltratando a sus actores que acaban exhaustos en los rodajes.
 No sé si la incluiría como otros entre las cincuenta películas a ver antes de morir pero para los amantes del cine fordiano es obligatorio verla. ).